México, 17 dic (PL) Con una asignación de seis mil millones de pesos (unos 300 millones de dólares) el proyecto del Tren Maya que impulsa el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ya está presente en el presupuesto nacional.
La asignación figura como parte de los 30 mil 400 millones de pesos (mil 520 millones de dólares) destinados a los proyectos de infraestructura ferroviaria, carretera y aeroportuaria en el paquete económico de 2019 que está en manos de ambas cámaras del congreso.
De acuerdo con lo proyectado, el Tren Maya tendrá una longitud de 900 a mil 500 kilómetros y pretende conectar los estados del sur: Quintana Roo, Campeche, Chiapas, Yucatán y Tabasco, según la visión de modernidad surgida de las culturas autóctonas que, en la perspectiva del gobierno, beneficiará a todos y no solamente a esas etnias.
Precisamente el domingo los jefes y chamanes de las 12 etnias que pueblan los cinco estados de la península solicitaron permiso a la Madre Tierra para construir el ferrocarril, mientras que el Estado se comprometió a no afectar ni los lugares sagrados ni el medio ambiente, sino por el contrario, garantizar un ferrocarril técnicamente no contaminante y amigable con el entorno.
Esa ceremonia marcó el inicio de la rehabilitación del tramo de vía férrea Palenque-Escárcega, primera de las acciones que da paso a la construcción del Tren Maya planeada para terminarse en cuatro años.
Allí el mandatario recordó que, inicialmente, las comunicaciones de la región se desarrollaron por mar y ríos para dar paso, tiempo después, al ferrocarril del sureste y finalmente las carreteras.
La obra dará un fuerte impulso a la economía nacional ya que superará con creces el récord de 10 millones de turistas que actualmente visitan la zona costera y que hasta ahora solo se dedican a disfrutar de las playas del Mar Caribe y no se introducen en los estados del sureste, donde se tiene esta riqueza cultural extraordinaria, según el presidente.
El mandatario considera que las zonas arqueológicas son las más bellas del mundo y el proyecto tiene que ver con ellas para impulsar el turismo y lograr que quienes lleguen a Cancún puedan visitar Yucatán, Campeche, Tabasco y Chiapas.
Por otra parte, el Tren Maya no marcha solo, sino que incluye un esquema de acciones simultáneas que mejorarán toda la región, entre ellas un programa de reordenamiento urbano, y otros específicos para estudiantes, adultos mayores y de empleo, de los que se beneficiarán los estados del sureste.